Por Karla Yee Amézaga
El profesor del ITAM Fernández de Castro y Gema Santamaría del New School for Social Research dieron cita para presentar el Informe de seguridad de la PNUD. El informe cubre temas como asesinatos, robos y percepción de la violencia en la zona de América Latina. En esta presentación se hizo una comparación entre las motivaciones del crimen y la violencia.
La plática comenzó explicando la problemática actual de violencia y crímenes en los países del continente americano. Uno de los ejemplos de violencia en esta zona es Venezuela, país que se encuentra, según los presentadores, indispuesto a presentar suficientes datos sobre la violencia en su país y donde lo poco que se sabe es que la tasa de asesinatos se encuentra en segundo lugar de toda América Latina. Por otro lado, el primer lugar lo ocupa Honduras con una tasa de cien homicidios por cada cien mil habitantes.
Se explicó también que es extraño que, a pesar del crecimiento económico y la disminución de la pobreza en América Latina, exista esta magnitud de inseguridad, pues es contrario a lo que las pautas económicas sugieren (indican que a mayor crecimiento económico, la inseguridad diminuirá). La respuesta de los presentadores a este problema es que el crecimiento se ha dado de manera desigual, lo que genera resentimiento y desesperanza por salir adelante, lo que a su vez se transforma en vicios de violencia y narcotráfico.
Los autores propusieron que la prevención y la intervención integral (confianza, mejora en la calidad de la información y participación ciudadana) son soluciones para este nuevo problema que, en sus palabras, es el equivalente a lo que fue en esta región la inflación y política macroeconómica hace apenas algunos años.
También hicieron un decálogo para mejorar. Los puntos principales cubrían: llegar a acuerdos a nivel de órdenes jurídicos, prevenir y bajar la impunidad y hacer más leyes de víctimas, entre otras acciones.
Al final de la conferencia, los exponentes contestaron preguntas que iban desde las preocupaciones comunes sobre el futuro del país hasta las tecnicidades que tuvieron que decidir para que el informe fuera lo más preciso posible.
¿Qué hay detrás del delito?
Según Gema Santamaría, la causalidad del delito debe comprenderse como un conjunto de varias razones interdependientes cada una de la otra. Las principales cuestiones que condicionan la violencia de América Latina comprenden: lo social, lo económico y lo material. Cada una de ellas se puede explicar brevemente de la siguiente manera:
Económico.- mientras en el resto mundo las cifras de homicidios han bajado, en los países latinoamericanos se ha experimentado un aumento definitivo de esta cifra(de los países africanos las cifras no son muy claras). Los autores explican que la baja reducción de la pobreza es un factor decisivo en la condición actual.
Social.-la movilidad social ha sido muy baja. A partir de esto, los ciudadanos están usando el crimen para estar a las expectativas de su nivel de vida. Es por eso que el robo es un crimen muy común. Por otro lado, las familias monoparentales han aumentado. Cada vez las madres prestan menos tiempo a sus hijos y tal acción se refleja en carencias de supervisión.
Material.- pueden verse como disparadores (el alcohol, las drogas y las armas), que son cuestiones materiales que acrecentan los índices de delincuencia. El alcohol es el disparador más importante en cuanto a que hay un buen porcentaje de delitos cometidos después de haberse consumido. Mientras que el consumo de drogas no representa un porcentaje importante de la causalidad de los delitos pero la violencia derivada de las cuestiones de su criminalización si va acompañada de una buena parte de los crímenes.
Institucional.- es la efectividad del gobierno para actuar frente a los actos violentos. En América Latina hay poca sanción a delincuentes grandes y las cárceles están sobrepobladas.
El Impacto
13% de los latinoamericanos ha sentido el deseo de cambiarse por temor a sufrir violencia en su domicilio o sus alrededores.
65% de los habitantes de América Latina dejó de salir en la noche por temor a ser asaltado.
El gasto en seguridad va desde el 2% en Costa Rica al 10% (Honduras) del PIB en los países de la categoría.
El decálogo
El informe propone diez acciones que deben llevarse a cabo para que la situación de violencia en Latinoamérica mejore:
1. Alinear los esfuerzos nacionales para reducir el delito y la violencia, con base en las experiencias y lecciones aprendidas.
2. Generar políticas públicas orientadas a proteger a las personas afectadas por la violencia y el delito.
3. Prevenir el delito y la violencia, impulsando un crecimiento incluyente, equitativo y con calidad.
4. Disminuir la impunidad mediante el fortalecimiento de las instituciones de seguridad y justicia, con respeto a los derechos humanos.
5. Potenciar la participación activa de la sociedad, especialmente de las comunidades locales, en la construcción de la seguridad ciudadana.
6. Incrementar las posibilidades reales de desarrollo humano para los jóvenes.
7. Atender y prevenir de modo integral la violencia de género en el espacio doméstico-privado y en el ámbito público.
8. Salvaguardar directamente los derechos de las víctimas.
9. Regular y reducir los disparadores del delito, como alcohol, drogas y armas, desde una perspectiva integral y de salud pública.
10. Fortalecer los mecanismos de coordinación y evaluación de la cooperación internacional.
Rafael Fernández de Castro es doctor en Ciencia Política por la Universidad de Georgetown y es el actual jefe de departamento de estudios internacionales del ITAM.
Gema Santamaría es egresada del ITAM por Relaciones Internacionales. Y es Maestra en Género y Política Social por la London School of Economics. Actualmente trabaja en el New School For Social Research.